segunda-feira, 7 de março de 2011

Mostra Fotográfica



ELIANA TRUSCELLO, SU ARTE

Titulo: Gineceo

Artista Eliana Truscello
Los invito a visitar su sitio y conocer sus obras.
http://www.elianatruscello.com.ar



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IMAGEN DEL HECHIZO, Muestra fotogràfica en conmemoraciòn del Dìa Internacional de la Mujer


Dolores Castro


En el fresco jardín, en la comodidad de la sala, en el inspirador estudio o en la calidez de la recámara, la intimidad de más de 40 escritoras se ve compartida por el ojo creativo del fotógrafo Barry Domínguez.

Bajo el título de Imagen del hechizo, surge esta muestra fotográfica de retratos de 44 escritoras mexicanas y extranjeras que se exhibirá del 8 de marzo al 21 de mayo en el Centro de Creación Literaria Xavier Villaurrutia.

A partir de la invitación del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes y el Instituto Nacional de Bellas Artes, la muestra se enmarca en la conmemoración del día internacional de la mujer, el próximo 8 de marzo. Como parte de esta celebración, se llevará a cabo un maratón de lectura a cargo de diversas escritoras que culminará con la apertura de la exhibición a las 19:00 horas.

Entre las autoras que se pueden contemplar en esta colección se encuentran personajes en plenitud tanto de carrera como de vida, algunas otras ya fallecidas, pertenecientes a diferentes épocas y de diversas edades.

Las escritoras que conforman esta exposición son: Aline Peterson, Ana Clavel, Angelina Muñiz Huberman, Elena Poniatowska, Ángeles Mastreta, Mónica Lavín, Rosa Beltrán, Miriam Moscona, Mónica Mansour, Silvia Molina, por mencionar algunas.

Entre las ya fallecidas, pero que se mantienen vivas a través de estos retratos, están: Pita Amor, Esther Seligson, María Luisa Puga, Elena Garro y Susan Sontag, mismas que congelan su luz por medio de las brillantes imágenes.

Intimidad y creación
Las más de cuatro decenas de imágenes expuestas forman sólo una parte del archivo de creadores que el fotógrafo ha retratado a largo de dos décadas. Entre su vasta colección, cuenta con una diversidad de retratos de escritores, pintores, filósofos, pensadores, fotógrafos, bailarines, entre otros.

La exhibición, donde destacan las fotografías en blanco y el negro, son de diversos formatos a partir de negativos en 35 milímetros, de 6 x 6, y algunas de formato digital.



Margo Glantz


Curiosamente, las imágenes surgidas a partir de la intimidad de las escritoras se instalarán en la intimidad del Centro Xavier Villaurrutia: en los pasillos, los cuartos, los salones y cada rincón de la casona de la colonia Condesa.

El interior del recinto se adapta a la perfección a los detalles de las imágenes. De esta manera, los retratos convergen en un mismo espacio y dan cuenta de los lugares de inspiración de cada una de las escritoras. “La curaduría buscó una armonía y juego con los pasillos y muros del espacio”, detalló Barry Domínguez.

La casa se adaptó para salones de enseñanza, los cuales servirán de aula de exhibición. Ahora, las clases de literatura se enmarcarán por la figura de destacadas escritoras. “Me encanta el retrato en general y el acercarte a visitar a diversos personajes, que en este caso son escritoras; lo que yo trato de plasmar es su mundo, mostrar su lugar de creación literaria”, explicó el fotógrafo, con más de 20 años de experiencia.

Mónica Lavín


Agregó que “quisiera que a partir de estas fotos la gente conozca donde trabajan cada una de ellas, su hábitat, su lugar de creación”.

Sobre las escritoras comentó que “todas tienen una personalidad distinta, unas cuentan con una extravagancia en su escritura, otras poseen una sensibilidad poética. Algunas tienen tal presencia física que es difícil no buscar retratarlas; son más expresivas y la imagen se puede apreciar con un mejor contenido”.

En entrevista, contó que para realizar dichos retratos visitó a las escritoras en su hogar o lugar de trabajo para que le mostrasen su sitio de inspiración. A algunas de ellas las fotografió en varias sesiones y a otras por casualidad en algún evento.

Entre las escritoras que se encuentran en esta colección destacó la imagen de Susan Sontag, quien dijo es muy importante en su vida, ya que ha sido una de las mujeres que ha dedicado parte de su escritura a la fotografía, cuestión que los une de alguna manera.


Elva Macías


De pelo cano y mirada aguda, Barry Domínguez opinó que la mujer actual en la sociedad mexicana es uno de los grandes personajes que pueden llevar adelante cualquier desarrollo, ya sea en el ámbito familiar o en el laboral. Está claro que cada día la presencia de la mujer se da más en el desarrollo de un país y de una sociedad.

“La fotografía es mi vida, ha sido unan gran compañía en momentos difíciles, y ha sido un transcurrir en mi proceso como fotógrafo que me ha dado emociones y grandes momentos”, señaló.

La exposición Imagen del hechizo, retratos de Barry Domínguez, permanecerá abierta al público hasta el 21 de mayo en el Centro de Creación Literaria Xavier Villaurrutia ubicado en Nuevo León 91, colonia Hipódromo Condesa. Entrada libre. Humberto Granados


Centro de Creación Literaria Xavier Villaurrutia
Avenida Nuevo León 91, colonia Condesa
www.literatura.bellasartes.gob.mx


La polifonía del género retrato

La infinita cantidad de colores que anidan entre el blanco y negro titilan en los retratos de esta exposición.

Torrentes álbeas, nubes de luz, la confrontación oscuro-claro se dirime en los gestos sinópticos de los cuerpos de escritoras que sonríen, reposan, esplenden en los oleajes de este mar tan magno, maremagnum en destellos.

Angelina Muñiz-Hubermann encierra en su aura radiante el flos campi de una multitud de ángeles, mientras Myriam Moscona realiza alquimia en un laboratorio de plantas, lámparas, estuches tubulares y poligonales de cristal, ánforas, vasijas, iguanas, cerámica, ensueños. Y mucha poesía.

Margo Glantz abre la puerta que conduce a su jardín: como en un óleo de Giotto, la luz inunda la estancia como un vendaval, mas todo es quieto, sereno, en su sitio, como el jardín donde Bárbara Jacobs brilla en la elegancia de su belleza, serena como Rosa Beltrán a la intemperie.

Muy entretenida, Carmen Alardín se confunde entre tres maniquíes; no se sabe si su mano izquerda toma el talle de la doncella de turbante o su mano derecha activa en muelle el gesto de sorpresa del muchacho sin cabello pero con harto asombro.

Otra mano, ahora la de Mónica Lavin, toca en mudra el umbral de la noche. El claroscuro tirita de tinieblas que se desperezan en hilos que cintilan, fibras apenas perceptibles que, reunidas, llenan un estanque de luz, cuyo oleaje lo presenta,no obstante, en estadío de meditación, íngrimo y quieto.

Aline Peterson realiza el milagro más portentoso por sencillo: ilumina con su sonrisa el juego completo de la composición fotográfica. Todo está en su sitio.

Como los ojos de papel volando a los que hace honor, de acuerdo con el título de una de sus obras, María Luisa Mendoza quien parece flotar en un juego de espejos, mientras Elena Garro se ensimisma en su metamorfosis: trepado sobre sus muslos, uno de sus gatos se cree ella, Elena, en tanto sobre las piernas de Amparo Dávila no hay gato: se ha convertido en libro, al igual que otros que reposan, apilados, sobre una mesita de noche.

De otro libro sale un verso hirsuto, que escapa de la mano izquierda de Elsa Cross, mientras de otro libro escapa la vista lectora de Julieta Campos en una mirada que asciende en vuelo de alondra alumbrada con música de Britten y Mónica Mansour emerge de entre un oleaje de portalápices, reglas métricas, agenda, tijeras, diccionarios, pilas de libros y papeles varios y todo eso explota: ha nacido un verso, justo en el vórtice de dos muros, cuyas alas son ventanas de vieja herrumbe y en la luminosidad lechosa de tales paredes emerge otra sonrisa, la de Blanca Luz Pulido, que en el nombre lleva la tesitura de esta polifonía de tonos de blanco y su contraparte oscura y el color que está enmedio y que nunca es gris, sino una suerte de canto a muchas voces escrito por Johann Sebastian Bach.

La batuta es una cámara fotográfica: está enfrente de un cristal que refleja al artista: Barry Domínguez obtura nuevamente y el reflejo le regresa un bastón multiplicado, un sombrero que quiere jugar al juego que inventó Magritte que no es sombrero y que, como en la ópera de Michael Nyman, confundió al espejo con un estanque, con un cristal de aparador, en una paráfrasis no escrita en honor del poeta chino Li-Po.
Click. La cámara en su estallido.

Torrentes, aluviones, vientos alisios. El infinito número de colores que anida en el vientre del género retrato, en el que Barry Domínguez es maestro.

Pablo Espinosa

Fuente: Difusión Cultual UNAM
www.unam.mx
créditos, link aqui.

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